Tartaleta multiporción de espinacas al toque de queso de cabra y cherry lips

Tartaleta de espinacas, queso de cabra y tomates cherry

Ingredientes:

- 1 paquete de masa brisa
- 800 gr. de espinacas congeladas
- 8 medallones de queso de cabra
- 6 tomates cherry
- 3 huevos
- 1 brick de nata líquida (200 ml.)
- aceite de oliva
- sal
- nuez moscada
- pimienta negra
- ajo en polvo

Preparación:

Cocer las espinacas, sin descongelar, durante 10 minutos aproximadamente, en agua con sal. Escurrir muy bien una vez cocidas y saltear en una sartén con aceite caliente, añadir una pizca de ajo en polvo y salpimentar al gusto. Por otro lado, batir los huevos y añadir una pizca de nuez moscada y una pizca de sal; añadir a las espinacas y mezclar bien para repartir el huevo. Añadir la nata y mezclar. Cocinar hasta que las espinacas hayan absorvido toda la nata y se quede una mezcla espesa.

La masa brisa se puede precocer ligeramente o hacerla junta a la mezcla de las espinacas. Si optamos por la primera opción, hablá que extender la masa en un molde engrasado, también se puede utilizar el papel de horno que viene con la masa, yo personalmente prefiero esta última opción porque así no hace falta engrasar el molde. Pinchar el fondo de la masa con un tenedor, rellenar el fondo con un puñado de garbanzos secos (para que hagan peso) y cocer en el horno precalentado a 170º durante 10 minutos aproximadamente, hay que estar pendiente de que no se tueste (como me ha pasado a mí según se puede apreciar en la foto).

Repartir la mezcla de las espinacas en el interior de la masa, y colocar encima los medallones de queso y los tomates cherry, decorando como más nos guste; los cherry conviene cortarlos por la mitad para poder repartirlos mejor.

Cocer en el horno a 170º-180º durante 15' si la masa ya está precocida, o 25' aprox. si la masa está cruda. Vigilar que la masa quede dorada sin que se gratinen demasiado el queso y los tomatitos.

Conviene consumir esta tartaleta mientras aún está caliente.